González Sobrino, Blanca Zoila
Premio INAH Javier Romero Molina 2003 a la mejor tesis de doctorado en antropología física<br><br>En las culturas coras y huicholas del Gran Nayar, el cuerpo humano constituye una estructura donde se procesan aspectos biológicos en función de una cosmovisión cuyos símbolos inciden en la ingesta de substancias psicoactivas y su relación con los patrones de parentesco. El presente trabajo, de corte interdisciplinario, abarca aspectos de biología, historia, etnología y genética. Partiendo del ensamble de elementos externos e internos del cuerpo humano, de sus experiencias y de su uso como instrumento del grupo que lo piensa, se apunta a la pregunta ¿qué tiene que ver la cohesión que refleja la identidad cultural con la estructura genética en estos grupos?<br><br>Así, el cuerpo humano –siendo vínculo real e imaginario en el ámbito colectivo– es analizado a partir de la relación cuerpo/alucinógenos como parte de la cultura en que opera como medio de experiencia individual, como símbolo social y religioso y como organismo susceptible de procesos filogenéticos.