Laboratorio Universitario de Radiocarbono

¿Cuándo pasaron los eventos que estudiamos?
El fechamiento

¿Qué es lo más importante en el momento de planear un viaje en el tiempo? ¡Pues saber a dónde vas! ¿Se imaginan si sencillamente se pusiera en marcha el vehículo y no tuviéramos idea de a qué época llegaríamos? Así de importante es conocer el tiempo en que se desarrolló nuestro sitio de estudio.
Durante muchos años esto se hizo a través de los rasgos de la arquitectura o por el tipo de cerámica; y aunque esto sigue siendo un aspecto que se trabaja de forma general para reconocer la época de un sitio, existen métodos cuantitativos, como el del “Carbono 14” o “Radiocarbono”, que permiten estimar edades numéricas para un sitio.

El carbono 12. También reconocido como Radiocarbono, es el isótopo más pesado y el único radioactivo del elemento carbono

 

El carbono 12. También reconocido como Radiocarbono, es el isótopo más pesado y el único radioactivo del elemento carbono
Átomos de carbono y su transformación en Nitrógeno

 

Todos los seres vivos estamos formados por millones de átomos de carbono que existen en tres tipos diferentes, en función del número de neutrones – el carbono 12, el carbono 13 y el carbono 14 (12C, 13C y 14C respectivamente). De estos tipos de átomos carbono, sólo el último es radiactivo (se transforma espontáneamente en otro átomo no radiactivo, liberando una partícula y un tipo de energía que conocemos como radiación). Mientras los organismos están vivos, la proporción de los tres tipos de átomos de carbono es prácticamente constante y es la misma que hay de manera natural en la atmósfera. Cuando el organismo muere, la cantidad de átomos de carbono 14 comienza a disminuir a una velocidad constante, pues ya no puede asimilarlos ni por fotosíntesis ni por la alimentación. Como conocemos la velocidad con la que se va transformando el 14C, si determinamos en el laboratorio cuánto le queda a una muestra que alguna vez estuvo viva, podemos saber hace cuánto tiempo se murió, lo que se conoce como fechar o datar.


Los materiales que se pueden fechar por 14C son restos de plantas como madera, carbón, semillas y hojas; restos de animales como huesos, dientes y conchas; materiales hechos a partir de organismos como textiles, papel, canastos, cueros, ceras, corchos y pigmentos vegetales. Otro requisito es que las muestras que se analicen hayan vivido dentro de los últimos 50,000 años.

El primer paso para estimar la edad de las muestras es eliminar cualquier tipo de material que no haya formado parte del organismo mientras estaba vivo, una vez limpia la muestra la transformamos en un líquido llamado benceno, el cual analizamos en un Espectrómetro de Centelleo Líquido para determinar su contenido de carbono 14. Finalmente, conociendo la concentración de 14C que tiene la muestra al analizarla y la velocidad a la que se transforma, podemos calcular cuánto tiempo ha pasado desde que dicho organismo se murió.

 

¿Cuándo pasaron los eventos que estudiamos?
El fechamiento

¿Qué es lo más importante en el momento de planear un viaje en el tiempo? ¡Pues saber a dónde vas! ¿Se imaginan si sencillamente se pusiera en marcha el vehículo y no tuviéramos idea de a qué época llegaríamos? Así de importante es conocer el tiempo en que se desarrolló nuestro sitio de estudio.
Durante muchos años esto se hizo a través de los rasgos de la arquitectura o por el tipo de cerámica; y aunque esto sigue siendo un aspecto que se trabaja de forma general para reconocer la época de un sitio, existen métodos cuantitativos, como el del “Carbono 14” o “Radiocarbono”, que permiten estimar edades numéricas para un sitio.

El carbono 12. También reconocido como Radiocarbono, es el isótopo más pesado y el único radioactivo del elemento carbono

 

El carbono 12. También reconocido como Radiocarbono, es el isótopo más pesado y el único radioactivo del elemento carbono
Átomos de carbono y su transformación en Nitrógeno

 

Todos los seres vivos estamos formados por millones de átomos de carbono que existen en tres tipos diferentes, en función del número de neutrones – el carbono 12, el carbono 13 y el carbono 14 (12C, 13C y 14C respectivamente). De estos tipos de átomos carbono, sólo el último es radiactivo (se transforma espontáneamente en otro átomo no radiactivo, liberando una partícula y un tipo de energía que conocemos como radiación). Mientras los organismos están vivos, la proporción de los tres tipos de átomos de carbono es prácticamente constante y es la misma que hay de manera natural en la atmósfera. Cuando el organismo muere, la cantidad de átomos de carbono 14 comienza a disminuir a una velocidad constante, pues ya no puede asimilarlos ni por fotosíntesis ni por la alimentación. Como conocemos la velocidad con la que se va transformando el 14C, si determinamos en el laboratorio cuánto le queda a una muestra que alguna vez estuvo viva, podemos saber hace cuánto tiempo se murió, lo que se conoce como fechar o datar.


Los materiales que se pueden fechar por 14C son restos de plantas como madera, carbón, semillas y hojas; restos de animales como huesos, dientes y conchas; materiales hechos a partir de organismos como textiles, papel, canastos, cueros, ceras, corchos y pigmentos vegetales. Otro requisito es que las muestras que se analicen hayan vivido dentro de los últimos 50,000 años.

El primer paso para estimar la edad de las muestras es eliminar cualquier tipo de material que no haya formado parte del organismo mientras estaba vivo, una vez limpia la muestra la transformamos en un líquido llamado benceno, el cual analizamos en un Espectrómetro de Centelleo Líquido para determinar su contenido de carbono 14. Finalmente, conociendo la concentración de 14C que tiene la muestra al analizarla y la velocidad a la que se transforma, podemos calcular cuánto tiempo ha pasado desde que dicho organismo se murió.